UNA BODA Y DOS FUNERALES

Me froto las manos insistentemente y soplo aliento por en medio de ellas. Ha sido un abril inusualmente frío, aunque las temperaturas bajas son más usuales en esta región del país. El agua fresca en mi rostro logra despabilarme totalmente; casi se me congelan las ideas. Llegamos por la media noche en el Lancer blanco, de nuestros amigos Estuardo y Ada, que tantas historias nuestras tiene.

 

Nadie nos recibió esta vez, solo la luz encendida de una lámpara suspendida en lo más alto de la pequeña edificación. Las gradas de madera nos conducirán al aposento (alto) donde pernoctaremos. Extrañaremos nuestra cama y habitación, pero es bueno tenernos el uno al otro. Nuestro hogar va donde nosotros vamos.

 

Después de unos minutos resolviendo las pequeñas diferencias para acomodarnos, nos encontramos metidos en las sábanas, más abrigados que de costumbre. Nuestras miradas se encuentran en medio de la oscuridad y un ósculo santo sella el “buenas noches” final.

 

Me quedo unos minutos despierto y medito en el enorme privilegio que es tener una esposa tan dispuesta a todo. Lily es una mujer increíble. Con un temperamento que pareciera indomable, es la persona más mansa delante de Señor que he conocido. No logro explicar cómo la he convencido para seguirme en las aventuras más locas que se me han ocurrido. La verdad es que no soy yo quien logra persuadirla, es su relación con Dios y el llamado que Él le hizo. Es bueno saber que fui llamado de la misma forma.

 

Se le acercó un maestro de la ley y le dijo: —Maestro, te seguiré a dondequiera que vayas. —Las zorras tienen madrigueras y las aves tienen nidos —le respondió Jesús—, pero el Hijo del hombre no tiene dónde recostar la cabeza. Mateo 8:19-20

 

4:30 am

El alboroto ya comenzó en la habitación abajo de nuestra alcoba improvisada. Se oyen los pazos y el cuchicheo de voces en un lenguaje que poco entiendo. El kaqchikel es el idioma de la región y siempre que estoy por estos lares, me digo que debo aprenderlo.

 

Hay un ambiente de nerviosismo, expectación y emoción mezclado con el olor a humo, te, café hervido, tamales de masa de maíz en vueltos en hojas de canac, frijoles que ya comienza su cocción y pan de costumbre. Estamos en Panimachavac , en casa de la novia y no es su familia quien ofrece la fiesta. Hoy le corresponde al novio y su parentela en Xepac, una comunidad cercana. Aun así, hay cierta excitación entre todos los que cohabitan este hermoso lugar.

Exactamente ¿qué pasará el día de hoy que oficialmente sean unidos en matrimonio Marta y Mario? Esa es una pregunta que puede tener muchas respuestas.

También hay otra pareja de jóvenes emocionados e ilusionados que se unirán en matrimonio, ellos en la ciudad de Guatemala. Paula y Mario han planeado los últimos meses este día especial. Dos notables estudiantes de derecho que unirán sus vidas.

 

«Yo aborrezco el divorcio —dice el Señor , Dios de Israel—, y al que cubre de violencia sus vestiduras», dice el Señor Todopoderoso. Así que cuídense en su espíritu, y no sean traicioneros. Malaquías 2:16

 

Fue Dios quien instituyó el matrimonio, es su idea y sueño. Es realmente increíble lo que tenía en mente, que dos personas se hicieran una sola. No es humanamente posible, pues vivimos en un mundo y sociedad individualista, donde cada vez más tendemos a vivir aislados y centrados en nuestras propias necesidades e intereses. Es muy común escuchar decir que “Es mejor solo que mal acompañado”.

 

Negarse a uno mismo y dedicar nuestro esfuerzo para construir una nueva vida, es un acto de humildad, donde el egoísmo no tiene cabida. Es por eso que cuando pienso en una boda, imagino dos funerales, pues mueren dos para que nazca un nuevo ser, una visión, propósito y compromiso. Dejar la comodidad y el abrigo de la casa paternan y todos los beneficios que hay se tienen y aventurarse a volar, para formar un nuevo nido, una nueva familia.

 

Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser.  Génesis 2:24

 

La verdad es que es más fácil vivir uno solo, pero cómo lo afirma Eclesiastés; son dos mejor que uno.  Obtener lo mejor siempre necesitará más esfuerzo y sacrificio. Y así es el matrimonio, un lugar para experimentar muerte a uno mismo y humildad, para obtener lo mejor. Pero esta tarea es imposible sin tener en cuenta al autor y consumador del matrimonio. Dios mismo. Seguir su consejo, principios y mantener una estrecha comunión con Él, es la única garantía de construir una relación perdurable.

 

Me fijé entonces en otro absurdo en esta vida: vi a un hombre solitario, sin hijos ni hermanos, y que nunca dejaba de afanarse; ¡jamás le parecían demasiadas sus riquezas! «¿Para quién trabajo tanto, y me abstengo de las cosas buenas?», se preguntó. ¡También esto es absurdo, y una penosa tarea! Más valen dos que uno, porque obtienen más fruto de su esfuerzo. Si caen, el uno levanta al otro. ¡Ay del que cae y no tiene quien lo levante! Si dos se acuestan juntos, entrarán en calor; uno solo ¿cómo va a calentarse? Uno solo puede ser vencido, pero dos pueden resistir. ¡La cuerda de tres hilos no se rompe fácilmente! Eclesiastés 4:7-12

 

Hoy nos alegramos con aquellos que contraen nupcias y por aquellos que están en esa ruta. Encontrará muchos obstáculos que sortear, presión interna y externa, pero tiene el respaldo y beneplácito de aquel que lo concibió, como una imagen de la unión de Él mismo con su creación.

 

para que todos sean uno. Padre, así como tú estás en mí y yo en ti, permite que ellos también estén en nosotros, para que el mundo crea que tú me has enviado. Yo les he dado la gloria que me diste, para que sean uno, así como nosotros somos uno: yo en ellos y tú en mí. Permite que alcancen la perfección en la unidad, y así el mundo reconozca que tú me enviaste y que los has amado a ellos tal como me has amado a mí. Juan 17:21-23

 

Bendecimos la vida de los dos Marios, Marta y Paula, que participan de su muerte y resurrección a una nueva vida. También tenemos en Mente a Christian, Juan Pablo, Melissa y Rebeca, quienes están en el desafío de una de las aventuras más emocionantes e increíbles que se puedan experimentar. El matrimonio, es para nosotros, morir, para volver nacer.

 

Ray & Lily

 

https://www.youtube.com/watch?v=kPBR3W-dscU

 

P.D. Esto fue ayer sábado 10 de abril

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